Gran porcentaje de accidentes, y entre ellos las quemaduras, podrían evitarse si se tuvieran en cuenta las medidas de prevención adecuadas. Las quemaduras se producen por desinformación en el manejo de elementos y sustancias peligrosas, y por el simple desconocimiento de reglas básicas que pueden aplicarse, en el hogar, en la calle y en el lugar de trabajo.
La prevención implica un cambio de hábitos y el adoptar conductas seguras para nosotros, nuestros hijos y para los que nos rodean.
La prevención no sólo es una acción que compete al personal encargado de atender la salud, sino a todas las personas que, por su posición en la sociedad o por su labor, ejercen un rol de comunicadores.
Se han enunciado decenas de normas, aquí trataremos de dar una recopilación de las mismas.
En el trabajo:
Decálogo de la prevención
1) Actuar de forma segura debe constituirse un hábito.
2) No te arriesgues: evita los riesgos o redúcelos al mínimo.
3) Presta atención al trabajo que realizas. El apuro es el mejor aliado del accidente.
4) Sigue las instrucciones y cumple las normas. No improvises.
5) Infórmate y fórmate en materia de Prevención de Riesgos Laborales.
6) Avisa de cualquier anomalía a tus superiores y a tus compañeros.
7) Ningún accidente ocurre por casualidad. Todos pueden evitarse.
8) La seguridad y la salud es tarea de todos. Involucrarse es imprescindible.
9) Tu trabajo es importante, disfruta de la tarea bien hecha.
10) Con la prevención de riesgos laborales, el beneficiado sos vos.
(Lic. Leandro Brambilla. Fundación ARGEN INTA)